Ese coste depende varios factores que iremos enumerando y explicando en este post.
Elegir y contratar un dominio
El dominio que elijamos va a ser la identidad de nuestra web en internet. Lo más recomendable es que sea corto, fácil de recordar y escribir, y a poder ser, relacionado con el contenido de nuestra web.
Debemos comprobar si el dominio que queremos está libre y su coste oscila entre 10 euros (son los dominios más habituales como los .com o .es) hasta 60 €, estos dominios son especializados.
Por otro lado, tenemos que recordar que este dominio hay que renovarlo anualmente.
Elección del CMS
Los CMS son sistemas de gestión de contenido, que están formados por una serie de programas para hacer funcionar nuestra web y además se pueden añadir otros para añadirle más funcionalidad.
La gran mayoría de CMS que podemos encontrar en el mercado son gratuitos como WordPress, Prestashop o Joomla.
Cada uno de estos CMS tienen sus propias características, pero ofrecen lo miso, una base sobre la que construir nuestra web.
El coste de los CMS que son de pago tienen un coste muy variable.
Diseño y textos del sitio
Esta es la fase más costosa del proyecto web. Debemos ponernos en contacto con un equipo de diseñadores y exponerles nuestro proyecto para que evalúen su desarrollo que supondrá unos costes que varían según la complejidad que tenga.
La manera más fácil y sencilla es instalando un tema, y adaptarlo a nuestros propósitos. Tenemos temas gratuitos y de pago. Por norma general los temas de pago contienen una inmensa mayoría de funcionalidades necesarias que acortaran la tarea del diseño. Por otro lado, los temas gratuitos suelen tener limitaciones.
Tenemos otra opción, y es crear nuestro propio tema para nuestro CMS. Esta opción resulta la más cara, requiere mayor conocimiento.
Por otro lado, los textos son un aspecto fundamental y no debemos olvidarnos de ellos. La legibilidad es algo muy importante, ya que forman parte de la experiencia del usuario.
Debemos recurrir a redactores expertos en SEO, capaces de dar a los textos el tono que se desea para que no sean castigados por los buscadores.
El diseño y la redacción de una web realmente profesional oscila entre los 2.000 y los 3.000 euros.
Pruebas finales, puesta en marcha y requerimientos legales
Debe tenerse en cuenta que la web debe responder a una infinidad de requerimientos y, antes de lanzarla, debe analizarse a fondo y comprobar si responde a lo que se espera de ella
En cuanto al coste de las pruebas y la legalización, puede notarse la ayuda de la fase de planificación. Si se ha hecho adecuadamente, el coste del diseño puede incrementarse en un 10 %, con un máximo del 20 %. Si no se ha planificado bien, habrá que pagar las horas de trabajo que sean necesarias hasta que esté arreglado completamente.
El alojamiento: una cuestión de necesidades
Este es otro de los aspectos a los que debe atenderse con mucho cuidado.
Existen diversas alternativas:
Hosting web. Es el más simple. Ideal para páginas que no tienen grandes expectativas de tráfico. El coste. Desde cero euros para el plan más básico, hasta 50 euros al mes para los más exigentes.
Servidor virtual. Se llama “virtual” porque es una partición de un servidor más grande. Su ventaja es que permite alojar no solo la página web, sino cualquier dominio que se desee alojar. Su ventaja es que proporciona en exclusiva los recursos de una máquina y que –al contrario del hosting– no se comparte el servidor con nadie. Hay más capacidad, más transferencia, más buzones de correo…El coste es más alto: a partir de aproximadamente cincuenta o sesenta euros al mes.
Servidor dedicado. En este caso, la empresa de hosting destina toda una máquina para alojar todas las webs que se desee. Son servicios de altísima capacidad y potencia y, en consecuencia, mucho más caros. El coste en este caso se dispara. El servidor dedicado proporciona gran potencia, pero el coste puede alcanzar los 700 euros mensuales.
Y, finalmente, el servidor cloud. Es el sistema más avanzado, mejor protegido contra fallos, más configurable y adaptable. Se trata de la modalidad de hosting más sofisticada. El coste, al tratarse de una tecnología muy nueva, es variable. Generalmente se cobra por uso y a partir de unos setenta y cinco euros al mes.
El mantenimiento de la web
- Adaptar la web a las sucesivas actualizaciones de software.
- Actualziar y dinamizar los contenidos mediante una estrategia combinada de social media y contenidos.
Para esta parte es precisa la intervención de un community manager (CM).
En cuanto a la parte técnica, los diseñadores de la página podrán hacerse cargo de ella. Una vez más, el coste va a depender de las horas de dedicación, pero, en condiciones normales, estas no serán más de cuatro o cinco horas al mes.